Con la baraja de cartas del póker se pueden disfrutar de una serie de juegos que se alejan de lo que tradicionalmente se ha ligado al póker. Y es que con esas cartas se puede jugar a más juegos que poco o nada tienen que ver con el póker y que, sin embargo, mantienen el espíritu competitivo.

Algunos se juegan de manera individual mientras te enfrentas al resto de jugadores de la mesa; otros tienen un leve carácter cooperativo. Hagamos un repaso por algunos de los mejores juegos de cartas para jugar con amigos y contra ellos, y descubre otra manera de disfrutar de juegos de cartas con la baraja de póker.

Mejores juegos de cartas para disfrutar con amigos

Hemos preparado un breve recopilatorio de juegos de cartas que, a nuestro juicio, son los mejores y más divertidos para jugar con amigos. Te vendrá bien seguir pasándolo bien de otra manera y con menos presión que en el póker.

  • Bridge. Es uno de los juegos más estratégicos de cartas. Se juega con un mazo de cartas de 52 naipes y, aunque es disfrutable con 2 jugadores, lo normal es que se juegue con 4 personas para formar dos equipos de dos. El objetivo es simple: acumular puntos a través de la captura de bazas, grupos de cuatro cartas jugadas por cada jugador en una ronda. La clave del bridge es la comunicación entre compañeros, porque cada jugador debe trabajar junto a su amigo para evaluar las manos y desarrollar una estrategia conjunta. Hay varias modalidades de Bridge, aunque la más popular es el Bridge Contract, en la que los equipos juegan para cumplir un contrato concreto basado en unas bazas específicas que piensan que pueden ganar.
  • Blind Hold’em. Aunque similar al Texas Hold’em de siempre, el Blind Hold’em es un juego de cartas en el que los jugadores reciben dos cartas iniciales, pero no pueden verlas, de ahí su nombre. Eso obliga a los jugadores a jugar con su instinto y, a base de intuición, tomar las decisiones que crean más acertadas. El hecho de que cada jugador tenga que tomar decisiones sin saber qué cartas tiene le da un plus de incertidumbre al juego, haciéndolo más interesante porque se basa todo en la percepción. Un jugador con grandes cartas puede dejar pasar una buena oportunidad si no atina con su instinto y viceversa, así que nunca se sabe quién puede acabar ligando la mejor mano.
  • Blackjack. Es un juego muy popular, justo porque aquí el juego es directamente contra la banca. Sin ser un juego cooperativo, todos los jugadores de una mesa de blackjack se enfrentan a la banca. Lo mejor del blackjack es que es un juego que es fácil de asimilar, pero difícil de dominar. Esas capas de complejidad son las que precisamente le dan un toque especial al juego.
  • Póker mentiroso. Es un juego basado en el engaño, en el que el objetivo es deshacerte de todas las cartas mintiendo sobre los naipes con los que estás jugando. Cuando sea tu turno colocas una o más cartas boca abajo sobre la mesa y dices qué cartas son. Evidentemente, puedes decir la verdad o no. La gracia aquí es que creer al jugador o no implica exponerse a recoger más cartas del mazo, lo que complica más la tarea de descartarse. Hay que elegir continuamente entre descubrir a un jugador mentiroso o no exponerse a robar más cartas.
  • Farol de ciego. Es conocido como “Blind Man’s Bluff”, y es un juego en el que todas las cartas se reparten boca abajo. Los jugadores no pueden ver ni sus propias cartas, y cada uno debe intentar adivinar cuál es el valor de las suyas. En base a esa información limitada, tendrá que tomar sus propias decisiones. En rondas posteriores y con más información, los jugadores pueden empezar a apostar deduciendo qué cartas tienen y cuáles pueden manejar el resto. Guarda bastante relación con el Blind’s Hold’em, solo que este sí se basa mucho en la estructura del Texas Hold’em, de ahí su nombre.
  • Póker chino. El póker chino es considerado como uno de los juegos de cartas de póker alternativos más queridos. Propone darle una vuelta de tuerca al juego, repartiendo a cada jugador 13 cartas, quien debe organizarlas en tres manos (la de arriba, la del medio y la de abajo). La regla de oro del OFC Póker es saber organizar sus cartas para que las manos sean válidas.
  • Gin Rummy. El objetivo aquí es formar los llamados “melds”, conjuntos de cartas concretos, y deshacerse del resto de cartas de la mano. Se hace en base a las 10 cartas que cada jugador obtiene al comienzo del juego, y en cada turno, el jugador debe robar una carta y descartar otra.

Aquí se tiene en cuenta la habilidad para planificar las jugadas y los momentos concretos y más propicios para declarar “Gin”. Además, reteniendo cartas adicionales puedes bloquear al oponente e impedirle formar sus melds. Un juego altamente estratégico perfecto para quien busque una alternativa profunda y duradera.