Como jugador de póker, con más o menos experiencia, hay una serie de términos en este juego que habrás de dominar a la perfección en cada partida en la que juegues si te preocupas por tus ganancias. Dos de ellos son rake y rakeback.

Si todavía no te suenan de nada estos términos, lo cierto es que tienen importantes implicaciones en cada mano que juegas y has de tenerlos en consideración, especialmente el rake, para decidir si has elegido bien la partida.

¿Quieres saber cuál es la importancia del rake y del rakeback en póker? ¡Te lo contamos!

¿Qué es el rake en el póker?

En pocas palabras, el rake es la comisión que se lleva la sala de póker por alojar una partida. Dicha comisión se emplea para financiar los costes del servicio y el mantenimiento del mismo. Por lo que podríamos decir que es un dinero bien invertido.

Como puedes imaginar, cada sala de póker establece su propio rake. De ahí que, al comienzo de nuestro post, hayamos hecho hincapié en la importancia de conocerlo para valorar si te interesa o no jugar la partida.

En términos generales, el poker rake suele ser un porcentaje pequeño del bote. Es, por ello que solo se cobra en las mesas en las que se juega con dinero real y solo es abonado por el jugador que se lleva el bote. ¿Eso quiere decir que aquellos jugadores que no ganen la partida no se les cobra rake? Eso es.

Como hemos mencionado, cada sala de póker establece su propia comisión, por lo que es interesante conocerla previamente. Si te estás preguntando si podemos establecer una media de rake en póker, la respuesta es sí.

Rake medio en el póker

Al analizar las condiciones de las salas de póker, casino o casas de juego, puedes encontrar diferentes condiciones en lo que al rake se refiere.

Por lo que respecta al rake en póker, además de que, por lo general, únicamente se cobra si la mano llega al flop, el porcentaje que se le cobra a los jugadores suele rondar el 5% del bote, aunque todo dependerá de los stakes que juegues.

En este sentido, merece la pena destacar que las apuestas micro y bajas cobran una comisión más alta, mientras que en las apuestas medias o high, la comisión suele ser más baja en término comparativos. En el caso de las primeras, el porcentaje de rake tiende a situarse en torno al 3%-6% del bote.

También es importante señalar que dependiendo de la modalidad que jueges, Limit o NL, también varía el porcentaje de rake. Por ejemplo, en el caso de las mesas con límite, se suele cobrar 0.25$ por cada 5$ de que haya en el bote hasta un máximo de 3$ de rake que corresponde a un bote de 60$.

Este límite máximo es lo que se conoce como CAP y es básicamente un techo que evita que la comisión en concepto de rake sea demasiado alta. En cuanto a las mesas sin límite, por lo general se suele cobrar en concepto de rake 0.05$ por cada 1$ que haya en el bote hasta un máximo de 3$ de rake.

Si este concepto de rake te ha dejado un sabor agridulce, te alegrará saber que el rakeback es el porcentaje del rake que es devuelto a los jugadores. ¿Te han entrado ganas de saber más? Atento a la definición completa.

¿Qué es el rakeback en el póker?

Como adelantábamos, rakeback en póker es el porcentaje que se devuelve de la comisión que se le ha cobrado al jugador y que recibe en forma de puntos canjeables por premios, bonos o lo que oferte la sala.

Como vemos, el rakeback está íntimamente ligado al rake por lo que, cuanto más rake generes, más rakeback te será devuelto. Es, por ello, que el rakeback suele beneficiar especialmente a los jugadores de póker regulares, aunque lo cierto es que depende en buena medida de la promoción o sistema de recompensas al que estés adscrito en la sala en cuestión.

Así, al igual que encontrábamos diferentes porcentajes de rake, también podemos hablar de distintos niveles de rakeback y que, sin duda, has de considerar pues influye directamente en las ganancias que percibes. ¿Qué tipos de rakeback puedes encontrar? Podemos dividirlos en dos modelos:

  • Rakeback directo: como su nombre indica, hablamos de una recompensa que el jugador gana directamente como, por ejemplo, a través de un bono de bienvenida u otras promociones de las salas. El rakeback directo puede desglosarse a su vez en tres tipos: dealt o rakeback repartido, rakeback plano o flat rakeback, y rakeback progresivo. Este último es el más habitual, cuanto más juegues, más cashback recibes.
  • Rakeback indirecto: quizá el que está imponiéndose en el mundo del póker. Es aquel que se consigue a través de las cada vez más populares carreras de rake. También puedes encontrar este modelo de rakeback en jackpots de la suerte de la propia sala o app de póker (cofres, ruletas, etc).

Independientemente del tipo de jugador que seas, tengas más o menos experiencia sobre el tapete verde, el rakeback ha de estar en tu punto de mira ya que, en definitiva, se trata de una fuente de beneficios extra.