El término “flop” en póker es básico para entender cuál es la dinámica del juego. Estamos hablando de un concepto que determina la estrategia y el enfoque de toda la ronda, así que es importante conocerlo bien y estar al tanto de su influencia en la partida.

Qué es en póker el flop

El flop es una de las etapas fundamentales en el póker. En concreto, este concepto se refiere específicamente a la distribución de tres cartas comunitarias boca arriba en el centro de la mesa, después de que cada uno de los jugadores haya recibido sus dos cartas individuales al inicio de una mano.

Es importante saber que el flop ocurre exclusivamente en las variantes de póker que emplean cartas comunitarias, un concepto que diferencia a juegos como el Texas Hold’em y Omaha de otras modalidades de póker que carecen de esas community cards, y que se juegan de otra manera. Por tanto, primer punto: el flop se asocia a las cartas comunitarias. De ahí nacen los conceptos “juego preflop” y “juego postflop”, es decir, el juego antes de la aparición de las cartas comunitarias y el juego después de que esas cartas hayan sido expuestas.

La aparición del flop se produce tras una ronda inicial de apuestas, conocida como «preflop», en la que los jugadores evalúan sus manos iniciales y deciden si desean continuar en la mano mediante una apuesta o retirarse.

Muchas veces, el buen juicio en el preflop determina todo lo demás, porque en las posteriores calles se arrastrarán las decisiones que hayas tomado con anterioridad.

De ahí que, si tienes buenas cartas, un juego preflop agresivo sea recomendable para dar un puñetazo en la mesa, aunque esto también puedes hacerlo si tienes intención de farolear. Una vez que se completa la ronda de apuestas preflop, el dealer revela las tres cartas comunitarias en el centro de la mesa. Y aquí empieza la estrategia de verdad: en cuanto se descubren las cartas, la mesa se convierte en un cúmulo de cálculos y probabilidades que cada jugador hace para sí.

Flop en el Texas Hold’em póker

El Texas Hold’em es una de las variantes más populares y ampliamente jugadas del póker en todo el mundo. Y aquí, el flop tiene un papel muy importante que puede determinar el rumbo de la mano.

Cuando los jugadores reciben sus dos cartas de jugador al inicio de la mano, comienza la primera ronda de apuestas, el preflop. Una vez completada esta fase inicial, el dealer revela el flop: tres cartas comunitarias dispuestas boca arriba en el centro de la mesa.

Estas cartas son compartidas por todos los jugadores y pueden ser utilizadas junto con las cartas privadas de cada jugador para formar la mejor mano posible.

La habilidad para interpretar y utilizar sabiamente las cartas del flop es un componente esencial para el éxito en el Texas Hold’em.

Los jugadores deben considerar la relación entre las cartas comunitarias y sus cartas privadas, evaluando sus posibilidades de formar diferentes combinaciones de manos. Además, deben sopesar las posibles combinaciones que sus oponentes podrían estar formando para tomar decisiones informadas en las rondas de apuestas posteriores. Dicho así, parece sencillo, pero el póker, y en especial el Texas Hold’em, está repleto de matices que lo hacen un juego muy profundo. La lectura de tells, el cálculo de odds… detrás de cada decisión hay un cálculo hecho y una probabilidad manejada.

En el flop, hay que tener en cuenta que la posición es importantísima. De hecho, una característica única del Texas Hold’em es la importancia de la posición en la mesa, por lo que todas las estrategias que manejes deberán ser basadas en el juego IP.

Los late-position (aquellos que hablan más tarde en la ronda de apuestas) tienen una ventaja estratégica considerable, ya que pueden fundamentar sus decisiones en base al juego de quienes han hablado antes. Esto les permite hacer una predicción de la fuerza percibida, otro aspecto crucial del flop.

En cambio, los early-position están en clara desventaja, pero a pesar de eso, deben mantener su juego IP si quieren tener alguna posibilidad pese al hándicap de tener que decidir con menos datos.

Cuando hablamos de estrategia, fuerza percibida y papel en el flop, tenemos que tener en cuenta que nos referimos a un impacto que se extrapola a toda la ronda. Porque el flop tiene un impacto muy importante en la estrategia de una partida de Texas Hold’em.

Los jugadores, tras ver las cartas, pueden evaluar sus propias perspectivas, llevando al póker a un nivel más rico y complejo, donde cada ronda de apuestas es una oportunidad para obtener información valiosa y aplicarla en la siguiente.

Aquí influye también el nivel del jugador. Porque aquellos que tengan más nivel, tantearán el terreno para ver si pueden bluffear. También es típico el slow play, que permite camuflar una mano muy fuerte, induciendo a error en la lectura que hagan los contrincantes.