Que los casinos son un negocio y que las normas están pensadas para que estos centros lúdicos ganen dinero es algo que no se le escapa a nadie.
Más allá de ser espacios donde quienes tienen dinero que apostar pueden hacerlo con la seguridad que ofrece un recinto pensado para ello, los casinos están diseñados para que perder dinero no sea una opción o, si lo es, que sea anecdótica. Porque ya lo dice el dicho: “la banca siempre gana”. Pero no es infalible, y vamos a ver por qué.
¿Cómo los casinos consiguen hacer dinero?
Para ser honestos, los casinos cuentan con espacios que no solo están pensados para el juego pero que hacen que jugar sea una experiencia singular. La principal, pero no la única. Por eso, es normal que los casinos se encuentren integrados en restaurantes, bares de copas o espacios de alojamientos como hoteles. Todo ello repercute positivamente en las arcas del casino, que ve complementados sus ingresos procedentes del juego.
¿De dónde vienen las ganancias que obtienen los casinos por norma? Veamos:
- De la hostelería y la restauración. Los casinos, sobre todo en Estados Unidos, cuentan con bares, pubs y buffet libre. Al consumir alcohol y estar atiborrado de comida, algo que en América parece un mandamiento, el casino no solo consigue unos ingresos extra, sino que hace que el jugador, habiendo ingerido una gran cantidad de comida y habiendo consumido algo de alcohol, esté lento de reflejos y le sea más fácil perder dinero.
- Del juego. Los casinos obtienen gran parte de sus ingresos del dinero que los propios jugadores pierden jugando al póker y a otros juegos. Pero es complementario, porque si un jugador gana, el casino debe hacer el desembolso. Y puede ser importante si el premio es gordo.
- De servicios complementarios. Muchos casinos, sobre todo en América, ofrecen servicios complementarios u ofrecen promociones para incentivar al jugador a probar suerte. El concepto “probar suerte” es una expresión para retener al jugador y que pierda un poco de dinero en favor del casino.
- De modalidades de juego con posibilidades bajas de ganar. Muchos casinos ofrecen modalidades de juego que cuentan con probabilidades muy bajas de ganar. Ningún juego debe ser imposible, pero algunas modalidades están diseñadas para reducir el índice de probabilidad de victoria.
- Tipos nuevos de juego para evitar la especialización. Lo peor para un casino es que los jugadores se conviertan en expertos de un juego. ¿Cómo se evita eso? Renovándolo, cambiando las reglas y ofreciendo incentivos extra que les permita “reiniciar” el nivel de los jugadores para que tengan menos probabilidades de ganar a la banca.
- Mediante rakes variables. El rake es el pequeño porcentaje de las apuestas que los casinos cobran en concepto de costes de organización. Es mínimo, y muchos están bonificados mediante el rakeback, pero es otra fuente de ingresos de los casinos que permite que el flujo de capital hacia sus arcas sea constante.
Además, los casinos cuentan con tácticas pensadas para que los jugadores consigan dejarse un dinerillo adicional antes de irse:
- Las salidas cuesta encontrarlas. Sobre todo, si hablamos de grandes complejos. En Estados Unidos es habitual encontrar salas hasta arriba de mesas, máquinas y personas, donde orientarse es complicado y encontrar la salida parece por momentos imposible.
- Nunca cierran. En Europa solo algunos casinos permanecen abiertos 24/7, pero en América es habitual ver que los casinos permanecen abiertos día y noche de manera ininterrumpida. Eso fomenta el crecimiento de las arcas de los casinos.
¿Cómo ganar al póker en un casino?
Hay muchos juegos disponibles en un casino, pero el póker es la estrella. Para tener alguna posibilidad de ganar a la banca es necesario que sepas jugar bien y tener una pizca de suerte. A grandes rasgos, estos consejos te pueden venir bien cuando estés jugando al póker contra la banca en un casino.
- Debes tener un dominio de tells absoluto. El póker en vivo, el que se juega en los casinos, requiere de un control absoluto del lenguaje corporal. Eso implica que debes ser un experto tanto leyendo los tells de los demás, como controlando los tuyos propios. Toda la toma de decisiones del póker en vivo se decide en base a lo que el jugador interpreta del resto. Si eres bueno en esto, eres bueno en póker.
- Juega IP. Ser consciente de la posición es vital en el póker en vivo, y jugar en posición siempre es mejor. Es algo extrapolable al póker online, pero en el póker en vivo tiene una especial importancia.
- Abandona si ves que el juego se pone en tu contra. Si tienes cabeza y tu objetivo realmente es batir al dealer, amortigua daños. Retirarte a tiempo es mejor que seguir en el juego de manera absurda.
- Los bluffs, solo en determinadas situaciones. Para intentar hacer un farol hay que ser un jugador de alto nivel, en póker online y en póker en vivo. No dudamos de tus capacidades, pero ten en cuenta que la banca ve todo tipo de jugadores y dominará la lectura corporal. Es difícil igualarla en esto, así que un farol no te saldrá así como así. Debes ejecutarlo suave, y para eso tienes que meterlo en una ocasión propicia. Si faroleas a lo loco, perderás enseguida.
No dejan de ser consejos generales para jugar bien al póker que, no obstante, te serán de ayuda a la hora de disputar una partida de póker en vivo en un casino.